Cómo evitar plagas y enfermedades en las orquídeas

Las orquídeas son plantas fáciles de reconocer, y es que sus flores no pasan inadvertidas. Son probablemente una de las plantas de interior más populares pero, en ocasiones sucede que cuando llegan a tu casa y pasan unos días, ya no están tan bonitas como las veías.

En este artículo te contamos cómo identificar y solucionar los problemas más habituales de este cultivo.

Cómo evitar plagas y enfermedades en las orquídeas

Si tu planta ha crecido pero tiene pocas púas o no desarrolla flores, puede ser debido a problemas medioambientales. ¿Estará en el lugar adecuado? La iluminación y la temperatura son muy importantes para la salud de la planta y en nuestro blog puedes encontrar un artículo con los “cuidados básicos” que necesitan las orquídeas. Pero, ¿cómo saber si está enferma o sufre el ataque de alguna plaga?

Cómo saber si mi orquídea está enferma

Si las hojas de la orquídea parecen arrugadas es posible que la planta sufra deshidratación, es decir que hay un problema de riego, o bien por falta de agua o porque se ha regado demasiado las raíces se han comenzado a pudrir.

Las infecciones causadas por bacterias suelen causar pudrición. El síntoma más habitual es que las hojas de la orquídea comienzan a ponerse amarillas o con manchas húmedas que a menudo están delimitadas por un borde amarillo. Si no se trata la infección a tiempo se puede extender por todas las hojas y llegar a pudrir hojas y raíces. En estos casos lo primero que se debe hacer es cortar la parte dañada con una tijera afilada y desinfectada y proteger la planta con un fungicida que active los mecanismos de defensa de la planta como la “cola de caballo“.

No podemos controlar el clima, pero sí prevenir los problemas que causan sus variaciones. Las condiciones de humedad alta pueden contribuir a que la enfermedad se propague con más facilidad, por lo que elegir el producto adecuado es clave durante los tratamientos, un fungicida recomendable durante períodos húmedos es Puntal.

Antracnosis en orquídeas

La antracnosis es una enfermedad fúngica que infecta la parte aérea de la planta, especialmente las hojas (aunque también puede afectar a la flor), donde se puede apreciar que las hojas se ponen marrones desde la punta y la mancha se extiende hasta la base. La zona afectada suele estar un poco hundida, aunque el resto de la hoja se ve normal.

Este problema se puede prevenir colocando la planta en un sitio bien iluminado (aunque siempre de forma indirecta), con movimiento de aire y temperatura más bien baja, pero si la planta ya está afectada entonces se debe aplicar un “tratamiento fungicida a base de cobre como Nordox”.

Productos para plagas en orquídeas

Algunos insectos como cochinillas y pulgones también pueden provocar daños en las orquídeas. Aunque este tipo de plagas son visualmente fáciles de localizar por el tamaño de los insectos, cuando el ataque se produce una señal típica es que las hojas comienzan a secarse o incluso se caen.

Combinar un “jabón insecticida como” junto con un “extracto natural de ortiga” es una muy buena opción para solucionar estos problemas, ya que logran debilitar la protección natural de los insectos para potenciar el efecto del insecticida y dejando más expuesta a la plaga, además fortalece de forma natural las defensas de la planta.

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